miércoles, 23 de enero de 2013

Mordiscos literarios / 2



El gran Michael Caine en la piel de Thomas Fowler (2002)


“[…] Era un país de barones rebeldes, como Europa en la Edad Media. Pero ¿qué estaban haciendo aquí los americanos? Colón todavía no había descubierto su tierra.
–Me gusta ese hombre Pyle –le dije a Fuong.
–Es impasible –respondió ella.
Y ese adjetivo, que ella fue la primera en usar, se le pegó como el sobrenombre de un escolar, hasta que, finalmente, se lo oí emplear al mismo Vigot, sentado bajo su visera verde, cuando me dijo que Pyle había muerto.
Hice detener nuestro triciclo frente al Chalet y le dije a Fuong:
–Entra y elígenos una mesa. Será mejor que me ocupe de Pyle.
Ese fue mi primer instinto: protegerlo. No se me ocurrió pensar que en realidad tenía que protegerme de él. La inocencia siempre solicita tácitamente ser protegida, cuando haríamos mucho mejor en precavernos de ella; la inocencia es como un leproso mudo que ha perdido su campana y que se pasea por el mundo sin mala intención.”

El americano impasible. Graham Greene (1955)
 

1 comentario:

  1. ¡Hola, Olga!

    Bienvenida al mundo bloguero literario. Gracias por pasarte por mi rincón y gracias también por las "flores". En cuanto al tema de los seguidores, yo no me obsesionaría por conseguir que te siga mucha gente, sobre todo al principio. Si el contenido de tu blog es bueno y está cuidado, los seguidores irán llegando con el tiempo como algo natural. Lo más importante es que te diviertas haciéndolo. Me iré pasando por loslibrosyolga para ver cómo evoluciona.

    ¡Ánimo y un saludo!

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